sábado, 4 de abril de 2009

SEMANA SANTA CON CRISTO

En esta semana se debería reflexionar y meditar en el mensaje que Cristo nos dejó, en su última cena nos enseñó a compartir el alimento -pan y vino- entre todos como hermanos, pero ese alimento debe entenderse mucho más extensamente es el alimento también de cuerpo y alma, el amor al prójimo. Examinemos pues nuestras vidas en que aspectos y sectores nos cuesta más prestar esa ayuda desinteresada y ofrecer nuestra amistad y nuestro amor, seguro que si profundizamos y buscamos saldrá a la luz el camino por el cual con buena voluntad y acción podamos hacer las rectificaciones necesarias para mejorar nuestra vida y la de los demás. Dijo Jesús " La señal por la que conocerán que sois discípulos míos será que os amáis unos a otros" (Jn 13,35).

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